Potencia | carga | vitalidad.
Para generar carga, es decir, para habitar la sensación de vitalidad sin necesidad de estímulos externos, es preciso despertar el contacto con el suelo, sensibilizar pies y piernas y permitir que surja desde allí el impulso hacia el movimiento. Esa es la carga orgánica que contiene información acerca de lo deseante, es decir, de lo que literalmente nos mueve, nos enciende. En la mayoría de las personas, el centro bajo está rigidizado o debilitado por lo que el registro del piso (y de sus propios pies y piernas) es débil (lo que produce inestabilidad, poca vitalidad) o firme pero excesivamente fijo e insensible (sensación de inercia, movimiento estereotipado, rutinario, maquínico). El plano de la verticalidad es dinámico aún cuando no se percibe movimiento externo. Utilizarlo como herramienta, dispara efectos profundos en el plano de las sensaciones y lo sensible. En las prácticas, estimulamos la toma de contacto con la tierra como fuente de soporte, firmeza y seguridad. Recuperar es