Afectar

 Uno no puede más que dejarse afectar por lo que profundamente lo mueve, por lo que lo conmueve. Porque allí, en la conmoción del movimiento hacia afuera, encontrará a la vez, un gemelo movimiento que va hacia adentro, que lo llevará inevitablemente, hacia lo desconocido de sí que estará allí constelado, esperándolo.

Ese es el camino de la ética. Ese es el mandálico proceso de la percepción y la conciencia. Un juego dual de fuerzas en despliegue.



Victoria

@psicologiasomatica

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